La crianza de los niños desde bebés es objeto de estudio de numerosas vertientes psicológicas y medicinales que se ubican en muchas ocasiones en extremos opuestos. Desde la lactancia materna, pasando por la cantidad de horas que tienen que dormir los recién nacidos, como la fundamentación de la importancia del colecho, hay un sinfín de teorías, muchas de ellas totalmente estudiadas y contrastadas.
La práctica que permite ubicar a los niños en la misma habitación que los padres, está muy extendida hoy debido a que permite facilitar algunas tareas y asegurarse el sueño. Sin embargo, un estudio de la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) este método “bajo ninguna circunstancia es seguro para el sueño de los bebés”.
Según los autores del informe del Grupo de Trabajo de la AAP sobre el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante, muchos padres eligen compartir la cama para facilitar la lactancia materna o por una razón cultural, pero esto sería la mejor opción. En su actualización de pautas, realizada en estos días, indican: “La evidencia es clara de que (dormir juntos) aumenta significativamente el riesgo de lesiones o muerte del bebé -enfatizó Carlin-. Por esa razón, AAP no puede apoyar el colecho bajo ninguna circunstancia”, señaló Rebecca Carlin, coautora de la investigación.
Si viene es cierto que los bebés cuando son recién nacidos deben dormir junto a sus padres, no es recomendable que lo hagan en la misma cama. Así lo indicaron desde la AAP, justificando el dato con la cifra de 3.500 bebés muertos al año sólo en estados Unidos, por causas relacionadas con el sueño. Además, aconsejan que el descanso de los bebés debe ser en superficie separada, firme y plana, ya que quedarse dormido junto a un bebé en un sofá, sillón o cojín y aumenta el riesgo de muerte infantil en un 67%. Un dato más que contribuye al modo adecuado de descanso tiene que ver con la preparación de la cama o cuna, que no debe presentar ningún objeto extra sobre ella.
La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de dicho país reglamentó nuevas medidas que entrarán en vigencia esta semana, y allí se indica que los únicos productos aconsejados para el sueño de los bebés incluyen cunas, moisés, plazas blandas y cunas de colecho. “Los padres no deben usar productos para dormir que no se comercialicen específicamente para dormir”, dijo la AAP en referencia a los carros de paseo o butacas para el auto, donde sólo podrán dormir mientras estén en el vehículo. Este dato es fundamental en cuanto a los avances en la comprensión del sueño de los niños.