El ejercicio y la actividad física son necesarios para sentirse mejor, fortalecer el músculo cardíaco, mantener el peso bajo control y prevenir el daño arterial causado por el colesterol alto. Con la pandemia y el teletrabajo, ahora muchas personas se mueven hoy menos que lo que lo hacían algunos años atrás. Este cambio de hábitos puede perjudicar la salud y traer consecuencias negativas como obesidad, enfermedades del corazón, presión arterial alta o colesterol alto, entre otras cosas.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), las enfermedades cardíacas fueron la principal causa de muerte en los Estados Unidos, incluso estando en el pico de la pandemia. Para los CDC hay cuatro pilares de un estilo de vida saludable para el corazón: una dieta nutritiva, mantener un peso saludable, no fumar y hacer ejercicio con regularidad. Si nos referimos a la actividad física, existen tres ejercicios que reducen el riesgo de sufrir un infarto, según un estudio de la Universidad Johns Hopkins.
"El ejercicio aeróbico mejora la circulación, lo que resulta en una presión arterial y un ritmo cardíaco más bajos", dice el fisiólogo Kerry Stewart. Además, según el experto, aumenta el estado físico aeróbico general y ayuda al gasto cardíaco, a reducir el riesgo de diabetes tipo 2 y a controlar la glucosa. Por ello se recomienda caminar a paso ligero, correr, nadar o andar en bicicleta al menos 30 minutos al día y cinco días a la semana.
Por otra parte, Stewart indica que "el entrenamiento de resistencia tiene un efecto más específico en la composición corporal". Y añade: "Para las personas que tienen mucha grasa corporal (incluido un gran abdomen, que es un factor de riesgo de enfermedad cardíaca), puede ayudar a reducir la grasa y crear una masa muscular más magra. Las investigaciones muestran que una combinación de ejercicio aeróbico y trabajo de resistencia puede ayudar a aumentar el colesterol HDL y reducir el colesterol malo o LDL". En este caso, es bueno hacer ejercicio con pesas o de resistencia corporal al menos dos días no consecutivos por semana.
En cuanto a los ejercicios de flexibilidad “como los estiramientos, no contribuyen directamente a la salud del corazón. Lo que hacen es beneficiar la salud musculoesquelética, lo que permite mantenerse flexible y libre de dolor en las articulaciones. Esa flexibilidad es una parte fundamental para poder mantener el ejercicio aeróbico y el entrenamiento de resistencia", indica el fisiólogo. Se recomienda practicarlo todos los días y antes y después de otro ejercicio. Algunos ejemplos son: estiramientos básicos para hacer en casa, el tai chi y el yoga.