La ola de calor rompe todos los récords que se le cruzan por el camino. Los termómetros sufrieron en demasía en este mes de junio y, a pesar de que el verano inició formalmente hace tan solo siete días el próximo sábado 01 de julio llegará la cuarta ráfaga de temperaturas extremas al país.
En este contexto, es razonable que las personas se pregunten qué les conviene consumir para proteger su salud. En el ámbito de las bebidas no deberían haber dudas. El consumo de agua tiene que ser de entre dos y dos litros y medio por día, dependiendo de la contextura física de la persona y el gasto energético que realice.
“En momentos de calor extremo como los que estamos viviendo, como mínimo hay que respetar ese nivel de consumo diario de agua y, en lo posible, superarlo, teniendo en cuenta que estamos perdiendo líquido por sudoración”, le dijo Martín Alfaro, médico especialista en Nutrición y miembro de la Sociedad Argentina de Nutrición, a Clarín.
Sin dudas que lo mejor para la hidratación y la salud es el agua. “Las infusiones pueden funcionar como complemento. Es cierto que tienen efecto diurético pero en el balance, el resultado sigue siendo positivo. Esto no quiere decir que sirvan para reemplazar al agua”, remarcó.
El especialista indicó que las bebidas azucaradas no son para nada beneficiosas. “Hay gente que piensa que son similares al agua y no es así. El organismo necesita utilizar más agua para diluir estos concentrados y eso lleva a que nos deshidratemos”, explicó.
Por último, indicó que pasa algo parecido con el alcohol. “Vemos una cerveza fría y nuestro cerebro piensa que por ser líquido nos hidrata y no. Tarda en metabolizarse y eso demanda mucha agua. Por eso, lo ideal sería evitar estas bebidas mientras transitamos una ola de calor. De no ser posible, la recomendación es consumir al mismo tiempo agua o soda”, declaró Alfaro.