El Día Internacional del Beso es una efemérides que se celebra cada 13 de abril desde el año 2013 con el objetivo de rendirle homenaje a una pareja de Tailandia que protagonizó el primer beso más largo registrado en la historia de una competición de besos.
La misma pareja tenía un récord de 46 horas dándose un beso de forma consecutiva perteneciente al año 2011. No obstante, un par de años después buscaron romper su propia marca y lo consiguieron al besarse de forma consecutiva durante 58 horas, 35 minutos y 58 segundos.
Hoy en día, el acto de darse un beso está asociado con el cariño, el bienestar emocional y también con el placer físico. Hay una serie de beneficios para la salud y calidad de vida que han sido confirmados por la ciencia desde hace un buen tiempo. Sin embargo, también hay una serie de enfermedades que se pueden contraer por culpa de esta acción.
En la actualidad, la higiene es indispensable para tener una vida saludable y evitar las enfermedades. Aunque es verdad también que en la vida de pareja puede ser que uno sea súper ordenado y limpio; mientras que el otro sea desprolijo y un poco sucio. Para evitar contagios al besar, lo que no se puede negociar es la higiene bucal.
En el año 2014, el microbiólogo holandés Remco Kort realizó un importante estudio que puso en evidencia la importancia de la higiene bucal para no contraer enfermedades al besar a la pareja. El científico analizó a 21 parejas y midió su microbioma bucal antes y después de un beso de 10 segundos.
El resultado fue contundente porque en ese corto tiempo se transmitieron hasta 80 millones de bacterias de boca en boca y cada una de llas podría terminar en una enfermedad. Por eso es importante la higiene bucal a la hora de dar un beso a la pareja.