Elon Musk arremetió contra Bill Gates al responder el tweet de un usuario que había destacado el “optimismo” del cofundador de Microsoft sobre la Inteligencia Artificial (IA). En su respuesta, Musk dijo que la comprensión de Gates sobre la IA era "limitada". A pesar de haber cofundado OpenAI en 2015, Musk decidió desvincularse del proyecto retirándose del consejo de administración de la empresa en 2018.
Desde entonces, se mostró crítico con el desarrollo de esta tecnología. De hecho, Musk lideró una petición conjunta de varias personalidades para desacelerar o frenar momentáneamente el avance de la IA, en principio durante seis meses, debido a la preocupación que genera su impacto sobre la humanidad.
El comentario de Bill Gates que desató la furia de Musk fue su afirmación de que la robotización de las fábricas se producirá en los próximos cinco a diez años gracias a la IA. Cabe destacar que Microsoft anunció recientemente una inversión de 10 mil millones de dólares en OpenAI para acelerar los avances en inteligencia artificial.
Si bien Musk no ha explicado claramente su oposición al desarrollo de la IA, se cree que se debe a su preocupación por el impacto que esta tecnología pueda tener en la humanidad, incluyendo el posible reemplazo de trabajadores por robots y la falta de control sobre su uso. Además, Musk ha hablado abiertamente sobre su temor a que la IA se vuelva demasiado poderosa y peligrosa para la humanidad.
En este sentido, Musk lideró la creación de Neuralink, una empresa dedicada a desarrollar interfaces cerebro-máquina que permitirían a los humanos fusionarse con la IA de manera segura. En lugar de oponerse al desarrollo de la IA en su totalidad, Musk parece estar enfocado en asegurarse de que la IA se desarrolle de manera responsable y segura para la humanidad.