El Servicio de Administración Tributaria (SAT) es un organismo que monitorea las situaciones fiscales de la población, que a diario regula las diversas situaciones financieras de la población, con el fin de mantener cierta armonía en las cuentas de las arcas públicas.
Seguramente no lo sabías, pero la entidad tiene conocimiento de tus movimientos y hasta podría quitarte dinero sin que te des cuenta, aunque con justa razón. Esto tiene que ver con que, por el incumplimiento de los trámites del Servicio de Administración Tributaria, pueden hacerse acreedores a multas o sanciones.
Ante esto, el SAT tendrá acceso a tu cuenta para 'cobrarse' alguna deuda o multa que se tenga, en caso de que se haya descubierto alguna irregularidad o falta de declaraciones en los movimientos financieros. El organismo, antes de hacerlo, se pondrá en contacto con el banco para pedir tu información y solicitar la transferencia para que cubra la sanción.
Las penas por no realizar la declaración anual varían desde los 1,400 pesos hasta los 17,370 pesos, dependiendo del tipo de incumplimiento y el tiempo transcurrido. Además, el incumplimiento en el pago de impuestos y la falta de presentación de la declaración anual pueden afectar el historial crediticio de los contribuyentes.
El SAT comparte los datos de adeudos fiscales con las Sociedades de Información Crediticia, como el Buró de Crédito y el Círculo de Crédito, los cuales pueden dificultar el acceso a créditos y generar condiciones desfavorables en términos financieros.