A veces echamos un vistazo a la ropa blanca y encontramos manchas amarillas en ella debido al uso y desgaste de la prenda. Es allí dónde cuestionamos sobre la esencia de la blancura de las telas que parecen estar percudidas con un tinte amarillento.
La humedad o no haber estado bien protegida en el closet durante un tiempo son las principales causas de la aparición de manchas amarillas. Para eliminarlas de la ropa, tenemos un truco infalible que te vamos a contar.
Después de leer los primeros dos párrafos pensamos que ahora la escritora nos va a dar una lista de elementos inconseguibles. Afortunadamente estos tips se pueden realizar con cosas que muy probablemente tengas en casa: agua, balde, un cepillo, jabón, vinagre blanco, bicarbonato de sodio y jugo de limón.
Este proceso se divide en dos parte donde. Luego de poner el foco en las manchas concretas como axilas o cuello, aplicaremos el mismo proceso al resto de la prenda. Comienza llenando el balde con agua caliente. Luego echa el jabón neutro hasta que el jabón se deshaga. Añadimos el bicarbonato y removemos hasta que haga espuma. A continuación, echamos el jugo de medio limón, provocando una pequeña reacción en la mezcla.
Sumergimos la prenda de vestir durante una hora para luego lavarla en agua fría con un chorro de vinagre blanco. La dejamos reposar otra hora más y escurrimos. Después de esto, es el momento de la lavadora. ¡Pruébalo! Puedes tener ropa blanca en tu armario otra vez.