Salud, iluminación, amor e inspiración son adjetivos que le caen muy bien al Reggae. Este estilo musical nace en Jamaica como forma de rebeldía, incursionando temas políticos y sociales como la desigualdad y los oprimidos. Sin embargo, se popularizó en Estados Unidos y Gran Bretaña por inmigrantes jamaiquinos después de la Segunda Guerra Mundial. Contemporáneamente, este género cruzó fronteras para inspirar la música en todo el mundo y se convirtió en el primer ritmo universal que llegó a un público internacional antes de internet.
Para saber por qué se conmemora el 1º de julio debemos retroceder a 1992. En aquellos tiempos, Winnie Mandela visitó Jamaica y destacó que “el poder de la música Reggae eleva, inspira y une”, al tiempo que aportó inspiración al pueblo sudafricano en su lucha. Entonces, desde aquí y en honor al discurso de la esposa del activista Nelson Mandela, una promotora local decidió celebrar por primera vez el Día Internacional del Reggae deleitando a las audiencias radiales locales durante 24 horas de este género musical.
Si revisamos la historia de este estilo podremos desglosar que deriva del Ska y el Rocksteady en la década del `60, mezclando ritmos caribeños y afroamericanos. Los pioneros fueron Toots and the Maytals en 1966, luego Clancy Eccles y Lee “Scratch” Perry. Pero quien realmente popularizó el Reggae fue la banda The Wailers, ese grupo formado por Bob Marley, Peter Tosh y Bunny Wailer. Desde allí y en adelante la cultura jamaiquina inspiró a miles de jóvenes alrededor del mundo.
Con el tiempo, el movimiento de la isla caribeña se volvió universal, y hoy se celebra en todo el planeta. El 29 de noviembre de 2018 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), declaró al Reggae como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Identidad, esperanza, felicidad, amor y paz son algunas de las letras que hoy recorren el mundo. El Reggae ha inculcado un sinfín de ideas y hoy puedes ver los colores de Jamaica en cualquier rincón sonando esta música tan revolucionaria e inspiradora.