El Día del estudiante se celebra este lunes 23 de mayo en México. Tanto dentro como fuera de las instituciones escolares y universitarias suelen haber actos y celebraciones en su honor. Su origen tiene que ver con una historia de lucha que data de 1929.
El Día del estudiante se conmemora cada 23 de mayo, recordando el esfuerzo de un grupo de alumnos que lucharon por la autonomía y la educación digna. En esta fecha, se celebra a quienes estudian y se reflexiona acerca de la importancia que tienen los jóvenes en el desarrollo y el crecimiento del país.
En 1929, un grupo de estudiantes decidieron protestar en favor de la autonomía universitaria. De hecho, gracias a su lucha, existe hoy en día la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Para aquella época, la UNAM no contaba aún con autonomía lo que generaba que, por ejemplo, el rector y el resto de las autoridades de la organización interna dependieran directamente del presidente de México, sin participación estudiantil en la elección y el Ministro de Instrucción Pública era el jefe de la Universidad.
Esos nombramientos, además de la crisis precupuestaria de la universidad, perjudicó lógicamente el funcionamiento interno de la institución. Se redujo el personal, crecieron las cuotas y muchos jóvenes debieron abandonar sus estudios. El 20 de febrero de aquel año, Narciso Bassols, que era el director de la Facultad de Derecho, anunció además un cambio del sistema evaluativo que obligaba a la presencialidad a los estudiantes, lo que complicó aún más las carreras de muchos de ellos.
Después de meses de lucha y varios altercados, el 5 de mayo los estudiantes decidieron tomar la Facultad de Derecho. El 9 de mayo votaron a favor de la huelga estudiantil invitando a su vez a otros alumnos de otras carreras. Para el 23 de mayo, las manifestaciones tomaron otro tono cuando la policía intentó dispersar violentamente a los jóvenes. La represión fue tal que el resto de la sociedad se sumó al reclamo de los estudiantes, que lograron días después, que el presidente interino Emilio Portes Gíl concediera la autonomía universitaria a la ahora Universidad Nacional Autónoma de México. De ahí que cada 23 de mayo, por pedido de la Escuela de Derecho de la UNAM es recordardo como el Día del Estudiante en México.