La tauromaquia es una disciplina que consiste en mantener una especie de contienda con un toro. Un hombre, de a pie o a caballo, molesta al animal para enfurecerlo y luego demuestra su destreza esquivando sus embestidas. Por lo general la práctica culmina con el asesinato del toro. Si bien en algunos países y regiones esta práctica ya está cancelada, en otros lugares ocurre lo contrario.
Nuevo León ha decidido convertir la tauromaquia en Patrimonio Cultural en su Estado. La decisión llega luego de una votación donde tres diputadas de Movimiento Ciudadano y del Partido del Trabajo votaron en contra, mientras que diez diputados del PAN y PRI votaron a favor.
Los municipios de la entidad serán los encargados de otorgar los permisos de autorización para que este tipo de espectáculos puedan ser celebrados, entre los que se encuentran el rodeo, el jaripeo, las carreras de caballos, las peleas de gallos y la tauromaquia.
De esta manera, se estableció un periodo no mayor a 90 días hábiles para que los municipios de Nuevo León adecuen sus reglamentos con el fin de cumplimentar este decreto. A pesar de que la votación aprobó la práctica de la tauromaquia, algunas organizaciones mostraron su rechazo, ya que este tipo de actividades y espectáculos atentan contra la integridad de los animales. Una de ellas fue Adopta Monterrey, la cual exigió congruencia a los diputados y diputadas para votar en contra del dictamen.
La asociación Unidos por el Bienestar Animal N.L. comentó que se entraría en un retroceso en cuanto al “trato ético” y el bienestar de los, además de que con esta iniciativa se modificaría la Ley de Patrimonio Cultural del Estado “que claramente invade la competencia en materia de protección animal que le compete a la Ley de Protección y Bienestar Animal para la Sustentabilidad del Estado de Nuevo León”.