Hubo grandes actores y cantantes en la época del Cine de Oro Mexicano que surgieron y brillaron en escenarios de todo el mundo. Dos de los principales fueron Pedro Infante y Antonio Aguilar. Ellos, además de haber trabajado juntos se convirtieron en grandes amigos.
Estos íconos de la música ranchera fallecieron hace un tiempo, pero su legado sigue vigente. El intérprete de “Flor sin retoño” falleció el 15 de abril de 1957 a los 39 años en un accidente aéreo. Por su parte, el padre de Pepe Aguilar murió debido a un síndrome respiratorio agudo severo a los 88 años, el 19 de junio de 2007.
La pareja trabajó junta en la pantalla grande. Antonio Aguilar debutó como actor en 1952, en el film “Un rincón cerca del cielo” y compartió roles con Pedro Infante. Estas horas de grabaciones formó una amistas que traspasó el cine y que duró durante décadas.
De hecho, Pedro Infante aconsejó en su carrera a Antonio Aguilar porque él se encontraba estudiando aviación en Nueva York y cambió su carrera por una beca de canto en la misma ciudad. De hecho en un primer momento era cantante de ópera, mas ‘El ídolo de México’ le aconsejó seguir con la música ranchera. “Pedro Infante fue el primero que me dijo: ‘Oiga hermano, usted es charro; no se vista de catrín, no olvide nuestras raíces. Él me estaba diciendo que yo sería un cantante de ranchero”, contó el abuelo de Angela Aguilar hace un tiempo.
Después de hacerle caso a Infante, Antonio Aguilar se dedicó completamente a la música ranchera como se le recomendó su compadre. El cantor de “Amorcito corazón” no dudó en ir a uno de los conciertos de su gran amigo que incluía caballos, además de la música.