Una vacuna experimental contra el cáncer de mama mostró resultados que despiertan esperanza en la comunidad científica gracias a su efectividad. La inoculación logró generar una respuesa inmune potente al enfrentarse a una proteína tumoral relacionada a esta enfermedad, demostrando su potencial médico.
La esperanza de vida para las mujeres diagnosticadas con cáncer de mama es de cinco años. Esta vacuna, según se observó en pacientes que tuvieron este tratamiento, permite seguir con vida por al menos diez años, como se pudo demostrar en la investigación.
La vacuna busca reemplazar tratamientos más agresivos que se emplean actualmente contra el cáncer de mama, como la intervención quirúrgica o la radiación y quimioterapia. Es por eso que la investigación se realizó con 76 mujeres que padecen una de las variantes con mayor tasa de mortalidad, la HER2.
La vacuna que se utilizó en este experimento estaba fabricada con instrucciones de ADN de la HER2, que suele encontrarse dentro de la célular. Según el estudio, la inoculación estimuló una respuesta inmunitaria efectiva contra el cáncer de mama sin que se padecieran efectos secundarios graves.
“Los resultados mostraron que la vacuna era muy segura. De hecho, los efectos secundarios más comunes observados aproximadamente en la mitad de los pacientes fueron muy similares a los que se ven con las vacunas contra el Covid-19: enrojecimiento e hinchazón en el lugar de la inyección y tal vez algo de fiebre, escalofríos y síntomas similares a los de la gripe”, agregaron desde el centro que realizó el estudio contra el cáncer de mama.