Los celulares son súper útiles en la vida de las personas y una pieza indispensable de las sociedades occidentales de la actualidad. Sin embargo, esto tiene su costado negativo porque la dependencia que tenemos de los teléfonos inteligentes es cada vez mayor.
Esto último se debe a que son dispositivos que nos permiten realizar una serie súper amplia de actividades con gran facilidad; mientras estamos conectados con todo el mundo. Más allá de las ventajas y beneficios, si no se tiene una seguridad informática acorde, pueden ser un recurso empleado por terceros para atacar a los usuarios.
Para proteger los celulares de los ataques de terceros, lo primero que hay que hacer es revisar las aplicaciones que tenemos instaladas. Si detectamos la presencia de alguna que no fue descargada por el usuario o si encontramos un programa extraño; hay que borrarlos inmediatamente.
Los expertos en ciberseguridad recomiendan utilizar un antivirus que detecte y elimine en simultáneo la presencia de ciertos programas maliciosos que suelen estar ocultos. El segundo consejo importante para detectar si alguien espía nuestros teléfonos o nos roba información, consiste en prestarle atención a la batería. Las aplicaciones espías funcionan todo el tiempo y consumen energía de manera anormal; en ese caso, debemos estar atentos y repetir el primer paso.
Por último, hay dos consejos que no deben pasar desapercibidos. Primero, hay que estar atentos a que el celular no presente fallas cuando intentamos usar diversas aplicaciones. Segundo, si la duración de los datos móviles se agotan demasiado rápido, puede ser que la aplicación espía los este consumiendo para cargarle información al servidor cibercriminal.