Tener un gato en casa puede ser una experiencia muy especial e interesante. Estas mascotas son muy cariñosas, mas lo expresan si lo desean porque también se caracterizan por su independencia.
Por lo general, los gatos suelen maullar en diversas ocasiones. Sin embargo, hay algunos casos específicos en los que no lo hacen, un suceso que puede ser preocupante para el resto de sus familiares. Si te preguntas por qué sucede, te comentamos que hay varias causas que lo explican.
¿Por qué mi gato no maúlla?
Si estás preocupado por la falta de maullidos de tu gato debes saber que no es mudo pero que puede haber algunas circunstancias en su vida que lo hacen mantenerse en silencio. Para empezar, debes observar su comportamiento en general, y si es necesario, consultar un veterinario para evitar problemas de salud.
1-Personalidad y temperamento:
Como las personas, cada gato tiene una personalidad única. Algunos son más callados, reservados y tímidos; mientras que otros son más extrovertidos. En el primer caso, prefieren comunicarse con formas más sutiles como gestos y comportamientos corporales.
2-Genética:
Las mascotas pueden tener una predisposición genética que influya en su comportamiento vocal. Hay algunas razas de gatos que son más silenciosas que otras. La raza “Maine Coon” es un claro ejemplo de una silenciosa y se diferencia de otras como la “Siamese”.
3-Experiencias pasadas:
Si el gato tuvo experiencias negativas vinculadas al maullido, es posible que haya padecido un trauma. El estrés, enfermedad o trato inadecuado son algunos ejemplos que pueden haber afectado a tu mascota.
En la mayoría de los casos, recomendamos que tu gato visite al veterinario para ver cómo está de salud y, de paso, entender sus preferencias de comunicación. Esto es fundamental para tener una relación armoniosa y comprensiva con tus mascotas.