Cientos de personas tienen el hábito de iniciar su día lavándose la cara, creyendo esto es algo esencial, y que servirá para mantener su piel limpia y fresca. Pero, según dermatólogos, esta práctica puede tener efectos perjudiciales a largo plazo. Aquí te mostramos por qué no debes lavarte la cara por la mañana y qué debes hacer en su lugar.
Al despertarnos corremos a lavarnos nuestra cara, para tenerla fresca o para eliminar los aceites naturales que tu piel produce durante la noche para protegerse e hidratarse. Sin embargo, lo que pocos saben es que estos aceites son esenciales para mantener el equilibrio y la barrera de la piel, que previene la pérdida de agua y protege contra agentes externos dañinos.
Por otra parte, es importante que sepas que el lavado matutino altera el pH de la piel, lo que puede favorecer el crecimiento de bacterias, hongos o virus, desencadenando problemas como el acné, la dermatitis o la inflamación. Además, realizar este procedimiento por las mañanas eliminará los residuos de productos cosméticos aplicados durante la noche, como cremas hidratantes o antiedad. Estos productos contienen ingredientes activos que actúan mientras duermes, ayudando a regenerar y reparar la piel. Al lavarte la cara por la mañana, desperdicias estos beneficios y reduces la eficacia de dichos productos.
Te preguntarás en que momento debes lavar tu rostro, y los dermatólogos coinciden en que la limpieza facial es más apropiada por la noche, antes de acostarte. Esto elimina maquillaje, protector solar, bacterias y suciedad acumulada durante el día, evitando la obstrucción de los poros y previniendo problemas cutáneos. Te recomendamos que elijas productos adecuados para tu tipo de piel, y en caso que no sepas que acudas a un especialista y te ayude a elegir.
Por la mañana, solo te recomendamos que enjuagues tu rostro con agua fría o templada, y, luego, aplica un tónico facial y una crema hidratante con protección solar para mantener tu piel saludable durante el día.