El colibrí una de las especies de aves más hermosas y llamativas que hay. Son seres nativos de casi todos los ecosistemas, bosques templados, selvas húmedas, desiertos, incluso en los picos más montañosos y altos de todo el continente americano. Estas maravillosas avecillas gramos se destacan entre los seres polinizadores, ya que poseen una aguda visión.
Son estéticamente muy atractivos debido a su colorido plumaje dependiendo lógicamente de su especie (en México habitan, aproximadamente, 57 diferentes). Los machos tienen el cuello casi siempre de un rojo brillante, azul o verde esmeralda y lo que diferencia a todas las especies es la forma de su pico.
Además, las leyendas populares afirman que cuando nos visitan, se trata del alma de las personas que amamos y ya no están más sobre esta dimensión. Ante esto, es gratificante cuando un colibrí se posa en tu jardín para alimentarse y existen algunos trucos que te permitirán tenerlos con más frecuencia. Según expertos, las flores amarillas son ideales, teniendo en cuenta que tienen un néctar delicioso para que un colibrí elija tu hogar
Las flores que prefiere el colibrí
- Salvia amarilla. Se trata de un ejemplar que produce abundantes flores tubulares de color amarillo intenso. Es una planta fácil de cultivar y se adapta bien a diferentes condiciones de suelo y clima.
- Trompeta amarilla. La denominada Allamanda angustifolia. También es un ejemplar resistente y de fácil mantenimiento, por lo que es perfecta para jardines pequeños o macetas en balcones.
Los colibríes también necesitan agua fresca para beber y bañarse, lo que te da otra oportunidad para atraerlos a tu jardín. Puedes colocar pequeñas fuentes o baños de pájaros poco profundos, pero debes asegurarte de cambiar el agua regularmente para evitar la proliferación de mosquitos y otras enfermedades.