El tinte del cabello es indispensable en la vida de las personas que detestan las canas. Luego de determinada edad, la melanina capilar empieza a perder poder y el pelo blanco florece con una facilidad nunca vista en la juventud. Muchas personas se lo dejan porque les gusta, pero hay otros que piensan lo contrario debido a que es sinónimo de envejecimiento.
El cabello se puede pintar de forma natural o industrial. En caso de que prefieras la segunda alternativa, debes saber que puede ser peligroso para el cuero cabelludo por la gran cantidad de componentes químicos que tienen ciertos tintes. Si optas por la primera, estás en el lugar correcto.
El hibisco es una excelente alternativa para sumar en un tinte natural. Esta flor de color rojizo le aportará un tono vibrante e intenso a tu cabello sin dañarlo. La siguiente receta no solamente es económica (gastarás menos de 100 pesos), sino también 100% natural. Solo necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1 taza de agua.
- 1 flor de hibisco fresca o seca.
Una vez recolectados, debes añadir una taza de agua en una pequeña olla y esperar que hierva. Luego, debes agregar la flor de hibisco y reducir el fuego bajo. El secreto está en dejar que se haga una infusión con el agua durante aproximadamente 30 minutos; mientras más tiempo la dejes, más intenso será el color del tinte casero.
Después de retirar la olla del fuego, tienes que dejar que la infusión se enfríe a temperatura ambiente. El paso final para poder tener el tinte casero con hibisco consiste en dejarla enfriar a temperatura ambiente, colarla y embotellar el líquido de color rojizo intenso.
El modo de aplicación es muy sencillo, debes lavar el cabello con tu champú habitual y secarlo con una toalla. Luego, tienes que vertir el tinte casero sobre tu pelo y cubrirlo completamente. Al menos debes dejarlo actuar durante una hora, pero mientras más lo dejes, más intenso será el color. El paso final consiste en enjuagarlo bien con agua tibia hasta que el agua salga clara y no utilizar acondicionador por dos días.