Para muchas personas el cabello no es solo un componente superficial de nuestra apariencia, sino un testimonio de nuestra identidad y estilo. El ritual de tu lavado será el momento clave si lo que deseas es que crezca rápidamente. No hay pócimas mágicas, sólo hay un enfoque consciente al lavar el cabello puede marcar la diferencia en su salud y longitud.
Sin embargo, este momento debe ir acompañado con la elección de los productos adecuados para cada cabello. La vitalidad capilar empieza con la elección correcta de lo que nuestro cabello necesita. Escoge champús y acondicionadores diseñados para tu tipo de cabello, fortaleciéndolo y manteniéndolo radiante. Puedes realizarte mascarillas capilares al menos una vez a la semana, elaboradas con ingredientes naturales como aguacate o miel, para no utilizar químicos.
La hidratación es el núcleo del crecimiento capilar, pero no se trata de una hidratación externa sino más bien de una hidratación interna. Muchas veces olvidamos de tomar nuestros 2 litros de agua diario, es imprescindible mantenerse bien hidratado, para tu salud, y también te ayudará con tu cabello y piel. Por otra parte, no olvides llevar una alimentación equilibrada, La alimentación es clave, añade vegetales de hojas verdes, frutas ricas en vitamina C, huevos y ácidos grasos omega-3 para nutrir tu cabello desde su raíz.
Por último, y debes darle un masaje suave al cuero cabelludo mientras te lavas estimula la circulación sanguínea, fomentando un crecimiento saludable. Evita tomar duchas calientes, para preservar la salud de los folículos pilosos. También dile adiós a los químicos agresivos, como tintes y tratamientos, que debilitan y dañan. Opta por alternativas naturales y limita la exposición al calor.
Y como plus, te traemos un dato que puede hacer crecer tu cabello porque estimula la circulación y aporta vitamina E. El aceite de oliva será tu gran aliado si quieres que tu cabello crezca velozmente. Debes masajear el cuero cabelludo con delicadeza tras calentar el aceite con tus manos.