Si abres la refrigerador y huele mal, hay que ponerle remedio cuanto antes. Los alimentos derramados, podridos o vencidos, junto con la condensación y la humedad exterior, contribuyen a un hedor desagradable en el refrigerador. A veces por pereza o, simplemente, por falta de tiempo no se suele llevar a cabo una buena limpieza de la nevera. Sin embargo, el refrigerador es uno de los electrodomésticos que más olores (y de mal gusto) puede llegar a albergar.
Por eso, es importante hacer hincapié en una buena limpieza del su interior. Tenemos los mejores trucos de limpieza para la cocina y ¡también para quitar el mal olor a la nevera! Pero, ¿por dónde empezar? Lo primero que hay que hacer es sacar todos los alimentos, o espera a consumirlos, y posteriormente haz la limpieza. Una vez tengas la nevera limpia es hora de deshacerte de los malos olores. Te enseñamos cuatro trucos caseros (e infalibles) para eliminar los malos olores del refrigerador para siempre.
Es un clásico en las labores de limpieza. También se puede usar para acabar con el mal olor en el refrigerador. Si comienzas a detectar algún olor desagradable, acude al bicarbonato de sodio. Para ello, prepara una mezcla de 15 ml de bicarbonato de sodio y agua. Con esta pasta resultante limpia las paredes, los estantes y las puertas. Deja unos minutos y limpia con un trapo con agua para eliminar la pasta de bicarbonato.
Es otra de las combinaciones más populares a la hora de desinfectar la casa. El vinagre y el limón son dos elementos naturales que ayuda a acabar con gérmenes, bacterias y malos olores en el refrigerador. Mezcla un zumo de limón, agua y un poco menos de vinagre, y pulveriza la mezcla por todo el refrigerador.
El café es una opción excelente para eliminar olores muy fuertes del refrigerador. Tan solo debes poner en un recipiente, un poco de café molido y dejarlo en los estantes de la nevera. Si hay otras zonas de la cocina donde también se ha instalado el mal olor, puedes hacer lo mismo.