SALUD

Haz esta mascarilla casera para regenerar el colágeno de tu piel

La piel se debe hidratar con colágeno para mejorar su estado de salud, eliminar arrugas e impurezas.

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Esta mascarilla con colágeno ayuda a mejorar el estado de salud de la piel..Fuente: Pexels.
Escrito en ESTILO DE VIDA el

La piel es el órgano más extenso pero también el más expuesto del organismo. El cuidado es indispensable para que se mantenga en buenas condiciones. En la actualidad, en el mercado hay infinitos productos cosméticos que prometen tenerla radiante pero la mayoría tienen tantos ingredientes químicos que terminan siendo agresivos.

Por ese motivo, muchas personas buscan aumentar los niveles de colágeno con distintas mascarillas naturales. Esta es una alternativa efectiva, pero principalmente segura para purificar, regenerar y mejorar el estado de salud de la piel. En ese caso, te enseñaremos a preparar una con miel y aloe vera.

La combinación de miel con aloe vera en una mascarilla natural es muy interesante porque son dos ingredientes que tienen propiedades curativas y rejuvenecedoras. Al utilizarlos juntos, brindan importantes beneficios en la purificación, regeneración y nutrición de la piel gracias a la capacidad antimicrobiana de la miel y las propiedades regenerativas y nutritivas del gel de la planta.

La preparación de la mascarilla natural es súper sencilla y, lo mejor de todo, es que no requiere ingredientes complicados. Lo único que necesitarás es:

  • 2 cucharadas de miel orgánica (preferiblemente cruda).
  • 1 cucharada de gel de aloe vera (extraído directamente de la hoja).

Lo primero que tienes que hacer es mezclar la miel y el gel de aloe vera en un recipiente limpio. Cuando consigas una pasta homogénea significa que el colágeno está listo, en ese momento tienes que lavar tu rostro con agua tibia y dejarlo secar suavemente con una toalla. 

Lo primero que tienes que hacer es aplicar una capa uniforme de la mascarilla sobre la piel, pero evitando los ojos y los labios. Luego, debes relajarte y dejar que actúe durante 15 minutos en el órgano más extenso del organismo. El paso final consiste en lavar suavemente el rostro con agua tibia y luego secarlo con palmaditas. Si sigues estos pasos dos veces a la semana notarás los cambios al mes.