En tu búsqueda por ganar masa muscular a través del yoga, es esencial considerar el estilo y la intensidad de tu práctica. Una mayor intensidad te hará sudar y quemar más grasa, al mismo tiempo que desarrollarás resistencia y fuerza. En primer lugar, tenemos el Vinyasa yoga, un estilo activo que combina diversas posturas de yoga en secuencias dinámicas llamadas vinyasas. Este enfoque te permitirá fortalecer todos los grupos musculares de tu cuerpo de manera equilibrada. Otra opción es el Power yoga, una variante más dinámica derivada del ashtanga yoga. Este estilo, te proporciona energía y vitalidad a través de posturas mantenidas un poco más que en el Vinyasa, lo que estimulará tanto tu resistencia como tu fuerza.
Para aquellos que van en busca de un reto emocionante, el Rocket yoga es la elección perfecta, ya que este tipo de yoga combina la práctica tradicional del yoga con variaciones, como posturas invertidas y de equilibrio, lo que exigirá una gran fortaleza en los brazos y el abdomen. También existen diferentes posturas, que te ayudarán a fortalecer los distintos grupos musculares, a continuación, te presentamos algunas de las más conocidas dentro del yoga.
Para fortalecer tus piernas, prueba la Postura de la luna creciente o Anjaneyasana, que te ayudará a tonificar los músculos de las piernas y la espalda. Para realizarla, debes colocarte con la planta del pie derecho en el suelo, la pierna derecha flexionada y la rodilla izquierda en el suelo detrás de ti con el empeine en el suelo. Inspira y levanta el tronco elevando los brazos al cielo con las palmas enfrentadas arqueando la columna. Al exhalar, lleva las manos al suelo para volver a la postura del perro boca abajo.
Para fortalecer tus brazos, la Postura del sol o purvottanasana es ideal. Con esta postura, abrirás tu pecho y estirarás tus brazos, lo que contribuirá a un fortalecimiento completo de los brazos y la parte superior del cuerpo. Además, el Chaturanga, en posición boca abajo, tonificará los brazos y los hombros mientras mantienes la postura en línea recta.
El abdomen no se queda atrás con el yoga, con técnica la llamada Vasisthasana podrás ganar fuerza en esa zona específica. Para hacerla debes girar el cuerpo hacia un lado, junta una pierna encima de la otra, estiradas, y sube el brazo de ese mismo lado. Mantén esta postura durante unos segundos y repítela, de esta forma ganarás fuerza en la zona abdominal. Sin dudas, el yoga ofrece diversas posturas y estilos que te permitirán fortalecer diferentes áreas de tu cuerpo. Además de relajarte, esta práctica te proporcionará una forma divertida y efectiva de ganar músculo, dejando atrás las típicas pesas del gimnasio.