La humedad en las paredes es un problema común en muchos hogares, especialmente en áreas con mucho vapor de aire o donde hay fugas de agua. Afortunadamente, existen varios ingredientes caseros que pueden ayudar a quitar la humedad de las paredes.
Uno de los más efectivos es el bicarbonato de sodio, que se frota sobre las áreas afectadas en las paredes y se deja actuar durante dos horas antes de retirarlo con un cepillo. Además, otros productos como la sal marina, la sal de boro y el talco también pueden ayudar a combatir la humedad.
Es importante conocer las causas de la humedad en las paredes para poder abordar el problema adecuadamente. Esta puede ser causada por la entrada de agua debido a una condensación, una fuga o un drenaje inadecuado. Las superficies frías como los canalones dañados y las tejas agrietadas también pueden atrapar la condensación. Para quitar la humedad de las paredes, es necesario identificar la causa y tomar medidas para solucionarla.
Si la humedad es causada por una filtración en las paredes, el primer paso será reparar el elemento que permite que el agua de la lluvia se cuele y arreglar la pared dañada. Si se trata de una condensación, establecer circuitos de ventilación puede ayudar a ventilar el aire interior de la habitación y evitar la proliferación de hongos. Si la causa es la capilaridad o filtración soterrada, una correcta impermeabilización será necesaria.
Además de estos consejos, existen trucos caseros para tapar agujeros y grietas en las paredes. La masilla para pared es el truco más efectivo y se aplica con una espátula y luego se lija para que quede lisa. La mezcla de pasta de dientes y aspirina también puede ser utilizada para tapar agujeros de la pared, y las migas de pan pueden ser una solución rápida y fácil para los agujeros pequeños.