Tomar una ducha es una forma de liberar de tu cuerpo todo rastro de suciedad que haya adquirido durante el día al realizar diversas actividades que te han hecho sudar y ensuciarte. Además, representa una forma de relajamiento total en el cuerpo que nos permite descansar y renovar energías para afrontar otro día tras acostarnos.
Pero claro está que hay que tomar recaudos a la hora de darnos un baño, ya que según expertos de la Universidad de Columbia, las personas no deben tomar una ducha todos los días, ya que esto evita la regeneración de los aceites naturales de la piel y hasta debilita el sistema inmunológico; lo mejor es hacerlo una o dos veces por semana, aunque se debe cambiar la ropa interior todos los días. Otras de las cuestiones que han observado estos estudiosos es que existen cosas que no debes usar para bañarte.
- Jabón Zote: NO se recomienda al momento de tomar un baño, ya que no se trata de un producto elaborado para el cuidado de la salud, sino para retirar manchas difíciles de las prendas.
- Geles de baño: según un artículo de Pilar Orús, doctora en Biología, esta clase de productos contienen tensoactivos y en una gran exposición pueden causar los siguientes problemas: descamación, enrojecimiento, resequedad, eccemas y hasta alergias; advirtió que la formación de espuma NO es un requisito para la limpieza.
- Zacate: estos objetos de baño pueden desencadenar padecimientos en las personas: el primero es la lifa, una pigmentación anormal en la piel; mientras que el segundo es la melanosis, es decir, la aparición de manchas oscuras que son sometidas a la fricción de un estropajo.
- Agua caliente: Leonardo Biolatto, médico especialista en medicina familiar y ambulatoria, afirma que el agua caliente puede ocasionar la formación de caspa, ya que favorece la proliferación de dicho hongo.
- Cepillos de ducha: Aunque el cepillado en seco es una técnica que puede ayudar a exfoliar la piel, ocurre algo similar que en el caso de los zacates, debe ser de manera moderada y con artículos especiales.