La mayoría de los habitantes de este planeta tienen una mascota en casa, algo que conlleva una especial responsabilidad ya que no se trata solamente de alimentarlo si no que también se debe hacer hincapié en la higiene para evitar enfermedades tanto para el animal como para quienes conviven con él.
Si tienes un gato, un problema recurrente es el mal olor en la arena, algo que se puede abordar tomando algunas medidas para mantener la bandeja limpia y fresca. Ante esto, tenemos un truco infalible que tiene al bicarbonato de sodio como ingrediente principal, un producto que tiene la capacidad de absorber los aromas feos y además es desinfectante.
En primer lugar, distribuye una capa muy fina de bicarbonato de sodio en el fondo de arenero. Después, cubre el producto con unos seis o siete centímetros de la arena para gatos que utilices de forma habitual. De este modo, la desodorización de la arena será mucho más efectiva.
Si, pese a estas recomendaciones, el mal olor persiste o se vuelve especialmente fuerte, puede ser un signo de un problema de salud en tu gato. En ese caso, consulta a un veterinario para descartar problemas médicos. Siguiendo estos consejos y manteniendo la higiene de la bandeja de arena, deberías eliminar o reducir significativamente el mal olor.