Siempre ocurren descuidos a la hora de planchar. Estamos alisando las prendas que permanecían arrugadas, nos distraemos por cuestión de segundos, el artefacto quedó sobre la ropa y el resultado es catastrófico: todo quemado. Ante esto, la tela seguramente no tendrá solución pero para limpiar la base metálica y pulida del utensilio hay un catálogo de trucos caseros.
El primero de ellos tiene a la aspirina como protagonista y con estos sencillos pasos podrás solucionarlo. Lo más importante es que la plancha esté conectada y a una temperatura moderada para evitar quemaduras. Se pueden usar unas pinzas pequeñas para tomar la aspirina, lo que evitará accidentes al usarla.
Acto seguido, se frota la pastilla las veces que sea necesario hasta que las manchas se desprendan. Una vez que concluya este proceso, se debe limpiar la plancha con un pequeño paño de algodón para retirar los restos de suciedad y de la aspirina.
Otro truco efectivo es hacerlo con pasta de dientes. Debes poner este producto sobre la base del artefacto y comienza a frotarlo con un trapo limpio. Luego debes encender el artefacto y activar el vapor. A los diez minutos la desconectas, deja que se enfríe y retira toda la pasta de la base.
El tercero tiene como producto al vinagre blanco. Debes calentar este ingrediente y luego mojamos la zona donde la plancha está dañada. Le puedes agregar dos cucharadas de sal para que sea todavía más efectiva este truco y luego de quitar mancha, la secas con papel o un trapo limpio.