Los callos (hiperqueratosis) son capas duras y gruesas de piel que aparecen cuando intenta protegerse de la fricción o la presión. Generalmente, se forman en los pies y las manos. La mayoría de las veces es causado por calzado que no ajusta bien y el engrosamiento de la piel es una reacción protectora.
Para eliminarlos existen varios tratamientos pero en este caso te vamos a recomendar un remedio casero fácil para que en cuestión de minutos puedas ver un cambio en los pies. Además, posteriormente dejará la piel suave y tersa, por lo que también es beneficioso para tu cuidado personal.
Vas a necesitar una aspirina y medio limón. Muele una pastilla de aspirina hasta que quede hecha polvo. Posteriormente, coloca este polvito en un limón y empieza a frotar con el cítrico el callo por un par de minutos. Deja actuar el remedio por alrededor de 15 minutos y finalmente retira la mezcla de tu pie.
Verás como el callo desapareció o se redujo considerablemente, además, tus pies o manos lucirán mucho más suaves, ya que también funciona como exfoliante. Si una callosidad o un callo se vuelve muy doloroso o se inflama, consulta al proveedor de atención médica.
Si tienes diabetes o un flujo sanguíneo deficiente, busca atención médica antes de tratar un callo o una callosidad por tu cuenta. Esto es importante porque incluso una pequeña lesión en el pie podría provocar una herida abierta infectada (úlcera).