La caspa es una afección común que hace que la piel del cuero cabelludo se descame. No es contagioso ni grave, pero puede ser vergonzoso y difícil de tratar. Se puede tratar utilizando diariamente un champú suave. Si eso no funciona, un champú medicinal tal vez resulte útil, pero también existen trucos caseros para combatirlas.
Uno de ellos es el aceite de árbol de té. Este remedio posee propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias. Estudios han demostrado que este producto puede combatir la cepa específica del hongo que la produce. Se recomienda diluir unas gotas en un aceite vehicular antes de aplicarlo en el cabello para evitar irritaciones en personas con piel sensible.
Otro producto recomendado es el aceite de coco ya que ayuda a hidratar el cuero cabelludo y prevenir la resequedad, que es un factor que puede empeorar la caspa. Además, es muy bueno para tratar el eczema, una afección de la piel que a menudo está relacionada con la caspa.
Por último, el aloe vera, que es una planta con propiedades antibacterianas y antifúngicas, las cuales son muy útiles para este problema ya que ayudan a combatir las infecciones fúngicas que contribuyen a esta afección.
También reduce la inflamación en el cuero cabelludo. Aunque se requieren más investigaciones, el aloe vera es una opción natural prometedora para combatir la caspa. Consulta a tu médico de atención primaria o a un médico que se especialice en enfermedades de la piel (dermatólogo) si la afección no mejora con el uso regular de champú anticaspa.