Sin importar la estación del año en la que estemos, nadie se niega a un vaso de Coca Cola. El distintivo sabor proviene en su mayoría de la mezcla de azúcar y aceites de naranja, limón y vainilla. En algunos países, como Estados Unidos y Argentina es endulzada con jarabe de maíz.
Pero en México y Europa sigue usando azúcar. En nuestro país se legisló, durante el mandato de Vicente Fox, a favor de permitir el uso de fructosa para endulzar la bebida y esto provocó una ola de protestas campesinas y varios cañeros del país emplazaron a huelga, pero estas medidas no lograron que la legislación mexicana diera marcha atrás.
La Coca Cola es, quizás, el refresco más consumido en todo el planeta pero no muchos saben los riesgos que tiene tomarlo todos los días. Uno de los grandes problemas tiene que ver, justamente, con el exceso de azúcar que posee, algo que puede llevar a problemas relacionados con el peso o enfermedades como la diabetes.
Además, al contener cafeína, podemos sufrir de ciertos efectos secundarios como insomnio, dolores de cabeza, inquietud e incluso ritmo cardiaco acelerado, entre otros.
Por otro lado, el ácido fosfórico de estas bebidas puede ocasionar problemas al desgastar el esmalte de tus dientes, dañar tus riñones y debilitar tus huesos. Por todo esto, su consumo debe ser responsable y evitar los excesos para cuidar tu salud.