La reina Letizia fue periodista y es la primera esposa de un rey de España que no pertenece a la realeza. Pese a que esto último no se note, ya que en la actualidad luce siempre radiante y cumpliendo los protocolos a rajatabla, pese a que antes llevó una vida como muchos.
En las últimas semanas trascendió que para cuidar su figura y ser una mujer saludable, la reina consorte realiza la famosa dieta Perricone y siguiendo sus directrices define su lista de la compra y, por lo tanto, lo que come en su día a día.
Esta dieta consiste en consumir productos con mucha proteína saludable además de alimentos antienvejecimiento y con propiedades antiinflamatorias, como por ejemplo: Frutas, verduras y hortalizas frescas. Legumbres, frutos secos. Proteína animal (incluyendo en el desayuno en el que no falta una tortilla de tres claras) y algunos lácteos desnatados. Además, otro de los productos que está presente en la despensa de la reina Letizia es el embutido ecológico, que tiene entre sus beneficios respecto a la carne alimentada con pienso y no eco, menor grasa total, mayor cantidad de omega 3, menos colesterol malo (LDL) y más antioxidantes. Para completar, Letizia bebe entre 1,5 y 2 litros de agua diaria.
Cabe destacar que esta flamante miembro de la realeza española tiene estrictamente prohibido consumir algunos alimentos como las pastas, arroces, dulces (el eritritol es el único endulzante que aprueba) o refrescos. Ni que decir tiene que los fritos también están vetados, al igual que ocurre con las harinas (solo la avena está aceptada).
También hay que destacar que la reina Letizia, volcada en la educación de sus hijas, también las traslada a la dieta de la Princesa de Asturias y la infanta Sofía como parte de su filosofía de que a los niños se les enseña a comer bien en casa y a una muy temprana edad.