Los japoneses tienen tradiciones milenarias que las respetan y mantienen intactas a lo largo de los años. Entre ellas la del rubro gastronómico que respetan a rajatabla y, en esta ocasión, te contamos el motivo por el cuál los ciudadanos de este país no consumen agua mientras ingieren sus alimentos y, de igual forma, se mantienen hidratados.
De las diferentes formas en las que podrían obtener su característica figura hay una que causa sorpresa debido a lo inusual de su técnica, que va contra todos los consejos instalados, ya que pierden peso sin tener que agotarse en el gimnasio. Lo curioso es que los japoneses no beben agua, pero lo reemplazan con una sopa bien caliente durante las comidas o un té caliente después de estas.
El objetivo de realizar esta curiosa técnica es el de ingerir en las comidas más alimentos que hidraten como las sopas o la fruta en lugar de acompañarlos con el agua. Además, este líquido tan natural para nosotros, según las creencias orientales, apaga los "fuegos digestivos", en otras palabras, la capacidad de digerir los alimentos que ingerimos haciendo que el pH del ácido estomacal disminuya y, por tanto, la capacidad de metabolizar los nutrientes. De esta manera lograríamos estar hidratados y bien delgados.
En contrapunto a estas creencias milenarias, la evidencia científica señala que beber agua no tiene ningún impacto en la metabolización de nutrientes. De hecho, incluso beber agua podría aumentar la saciedad de las comidas y el vaciado gástrico es más lento, aunque es válido aclarar que beber agua no hace que metabolices menos los alimentos.
En los países occidentales, los consejos sobre dietas instan a las personas a beber más agua, pero en lugar de hacerlo, lo que tendríamos que aprender de los japoneses es a consumir más alimentos que logren hidratar a nuestro cuerpo. Esto podría significar agregar sopas con tus comidas o comer pan al vapor en lugar de pan horneado. También implica eliminar cualquier cosa que deshidrate, como la cafeína y los tés negros.