La chía son semillas extraídas de las flores de una planta perteneciente a la familia de la menta. Debido a sus múltiples beneficios para la salud, se comercializa en todo el mundo, al margen de que su origen sea la región de Centroamérica. Este diminuto alimento contiene poderosos antioxidantes, al tiempo que vitaminas y minerales que son necesarios para el correcto funcionamiento del organismo y su equilibrio. Sin embargo, existen algunas personas a las que se les tiene vetado su consumo por las razones que vamos a explicar a continuación.
Los beneficios de incluir en tu dieta las semillas de chía son varios: podría ayudar a reducir la inflamación, mantener un peso saludable, mejorar la salud de tus huesos por el aporte rico en calcio o colaborar a regular la concentración de glucosa en la sangre. Pero el exceso de este alimento podría ocasionar efectos secundarios en algunos casos con diagnósticos determinados o bajo el efecto de algunos fármacos.
Si bien son pocos los casos en el mundo que se han reportado en los cuales las semillas de chía han sido contraproducentes, es bueno tener en cuenta cuándo debemos estar alerta para consumirlas. Puede que al ingerirlas por primera vez se logren identificar ciertos síntomas característicos de las alergias alimentarias. Si estás dentro de ese reducido grupo, se recomienda eliminar la chía y consultar a un especialista.
El primero sería, si tiene problemas digestivos. La chía es muy recomendada para las personas que sufren estreñimiento, ya que contiene 11 gramos de fibra en solo 28 gramos de la semilla. Pero su consumo en exceso podría provocar inflamación, meteorismo, malestar general, dolor de estómago o incluso diarrea. En el caso de personas con la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa, la fibra en las semillas de chía podría empeorar los malestares asociados a estas enfermedades.
El otro caso en el que deberías prohibir la chía es si tomas ciertos medicamentos. Debido al efecto que tiene la chía en la regulación del azúcar, quienes se encuentran en tratamiento por la diabetes, deberían evitar ingerir estas semillas, ya que podrían interactuar con los fármacos, especialmente la insulina. Del mismo modo sucede para los pacientes que toman medicamentos para la presión, debido su potencial para disminuirla naturalmente podría derivar en una hipotensión, dependiendo de cada caso.