Una de las preguntas más frecuentes que existe entre las personas que empiezan a crecer y a hacerse controles periódicos de salud es ¿A qué edad deberíamos comenzar a controlar nuestra hipertensión y cada cuánto tiempo debemos repetir estos controles médicos?
La realidad es que está comprobado científicamente que todos somos distintos y que cada caso es particular. Sin embargo, hay algunos parámetros generales en lo que se puede definir un estimativo etario para hacer este chequeo de salud. En el caso de que en el historial familiar del paciente existan antepasados con hipertensión hay que empezar a medirla a edades más tempranas, por ejemplo, a los 40 años; en caso contrario se debe realizar a partir de los 50 años.
En el caso de que la tensión arterial sea normal, se puede medir una vez por año; en caso contraro se deben realizar mediciones semanales para comprobar que el aumento no es algo aislado. Uno de los principales peligros que conllevan estos cambios en el flujo sanguíneo es que no presenta síntomas, a excepción de que la enfermedad esté muy avanzada.
Una de las características principales de la hipertensión es "que no presenta unos síntomas claros y estos pueden tardar mucho tiempo en manifestarse. Sin embargo, constituye el factor de riesgo cardiovascular más prevalente”, subrayó el doctor Rafael Florenciano, jefe de la Unidad de Cardiología de Quirónsalud Torrevieja.
Más allá de que no existen síntomas relacionados estrictamente con la hipertensión, el especialista sí confirmó que hay algunos pacientes pueden quejarse de cefalea o de nucalgia: “Estos síntomas ayudan a detectarla porque ponen en alerta al paciente que decide ir al médico o acudir a la farmacia a que les tomen la tensión arterial”.