Un reciente estudio desarrollado por investigadores de la Universidad de Stanford ha concluido la edad a partir de la cual las personas empezamos a envejecer. Según el análisis que fue publicado en diciembre en Nature Medicine es a partir de los 34 años que comienzan a detectarse las primeras señales de envejecimiento.
Para llegar a esa conclusión, los investigadores han estudiado los niveles de 373 proteínas que circulan en la sangre en una muestra que se hizo sobre 4.263 personas de entre 18 y 95 años. Los resultados demostraron que el envejecimiento fisiológico no sucede a un ritmo uniforme, sino que hay tres puntos de inflexión concretos en el ciclo de la vida humana. El primero se da, como decíamos, a los 34 años. Después de éste, el otro punto de inflexión es a los 60 años y el tercero se da a los 78 años.
¿Qué es lo que sucede a esas tres edades? Tony Wyss-Coray, profesor de neurología y ciencias neurológicas y autor principal de este estudio, explica que el número de proteínas transmitidas por la sangre exhiben cambios notables. "Esto sucede porque en lugar de simplemente aumentar o disminuir de manera constante o permanecer igual durante toda la vida, los niveles de muchas proteínas permanecen constantes durante un tiempo y luego en un punto u otro experimentan cambios repentinos hacia arriba o hacia abajo".
Partiendo de esas edades es que se agrupan tres momentos de la vida adulta de las personas: la edad adulta temprana, la edad media tardía y la vejez.
En el estudio, los científicos también señalan que este hallazgo podría tener injerencia a la hora de detectar afecciones que están relacionadas con el envejecimiento, como lo son el alzhéimer o enfermedades cardiovasculares. Y marca la ciencia cinco señales propias del envejecimiento: el metabolismo se vuelve más lento, la estructura ósea se debilita, se comienza a tener problemas para recordar cosas, se modifican de los patrones del sueño y la estructura ósea comienza a deteriorarse.