El paracetamol y el ibuprofeno son dos de los analgésicos más conocidos. El fármaco es utilizado para bajar la fiebre, reducir el dolor y disminuir el malestar. Incluso ha sido prácticamente el más recomendado a la hora de contagiarnos de coronavirus.
En materia de salud, el paracetamol es uno de los más seguros. Entre las principales diferencias con el resto de los analgésicos es que este fármaco no hace daño al estómago. Además, siempre que se respeten las dosis adecuadas, no deriva en efectos secundarios ni tampoco nocivos a largo plazo. Hay que tener en cuenta que la dosis no debe superar nunca los 4 gramos diarios.
Paracetamol y alimentos
Mas allá de los beneficios del paracetamol, a diferencia de otros analgésicos, hay que tener ciertas consideraciones a la hora de tomarlo. Siempre se recomienda no beber alcohol si se están tomando fármacos. Entre los riesgos se encuentran los daños al hígado.
Resulta aconsejable ingerir el paracetamol con agua. Es el único líquido que no altera las propiedades analgésicas ni tampoco provoca reacciones adversas tales como reacciones alérgicas. Incluso un estudio reciente logró demostrar que el zumo es una de las bebidas que más alteraba la liberación programada de un fármaco.
Otra de las preguntas que muchos pacientes se hacen es si el paracetamol debe tomarse en ayunas. Existen investigaciones que afirman que "la toma de este fármaco con alimentos no afecta a la eficacia del mismo". Sin embargo, ingerirlo cuando se ha comido en abundancia no es recomendado. Tampoco se recomienda el consumo de carbohidratos durante las tomas.