Muchas personas sufren de acidez estomacal y reflujo gástrico. Esto, que también es conocido como indigestión ácida es un problema de salud muy común en la actualidad. Esto, que se debe a cambios hormonales y físicos, se caracteriza por incluir una sensación de ardor que normalmente se extiende desde el esternón inferior hasta la garganta.
Los síntomas principales de una indigestión incluyen una sensación de ardor dolorosa en el pecho o la garganta, ventosidades, mal aliento, hipo o tos, acidez o reflujo ácido, náuseas, distención abdominal, gases y eructos, que en ocasiones traen un líquido o restos de alimento con sabor amargo o descompuesto. Si una persona tiene acidez más de dos veces por semana es posible que padezca una enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).
Las víctimas más comunes de la indigestión ácida son las mujeres embarazadas porque la placenta produce progesterona, una hormona que relaja los músculos lisos del útero. También es común que, para encontrar alivio, muchas personas tomen medicamentos con efectos secundarios adversos. Lo que no todos saben es que, por medio de las hierbas medicinales, se pueden obtener maravillosos resultados.
Los tres remedios naturales son jengibre, manzanilla y menta. El primero de ellos combate los problemas gastrointestinales o del estómago. Esto se debe gracias a sus propiedades anti-inflamatorias y contra las náuseas; es benéfico para tratar el reflujo ácido porque mejora el proceso de la digestión mediante la promoción del movimiento intestinal espontáneo.
La manzanilla, por su parte, es considerada el más popular remedio herbal para luchar contra la acidez. Gracias al alto contenido de calcio que incorpora, suele disminuir los ácidos en el estómago por lo tanto, disminuye la irritación del esófago y ayuda a la digestión adecuada.
La última planta medicinal, la menta, posee una gran cantidad de propiedades curativas que ayudan a la buena digestión. Ayuda a aliviar y calmar el estómago, y reduce las posibilidades de ataques de reflujo. Por lo general, las personas hierven las hojas de menta con cardamomo para realizar las infusiones; aunque también es posible hacer jugo o mezclar el polvo de las hojas de menta con otras bebidas o alimentos; e incluso comer caramelos de menta ayuda a aliviar la indigestión ácida, la incomodidad y el dolor.