El diseñador de moda Calvin Klein cumple este 19 de noviembre sus 80 años. Aunque se retiró a principios de siglo de la industria de la moda, su presencia sigue vigente gracias a la influencia que tiene su marca, la cual supo darle forma al minimalismo noventero y hoy continúa como furor entre la ropa a presumir.
Tras una vida de amplios éxitos en los negocios, no es raro para nadie que Klein pueda presumir de varios lujos. Entre ellos, se contabiliza una mansión que llegó a vender por 85 millones de dólares. A pesar de que cambió de dueño, su personalidad logró que asociaran la vivienda a su persona aunque ya no la habite.
La mansión se encuentra en East Hampton y fue construida en 1891: está rodeada de tres hectáreas de tierra y cuenta con cinco habitaciones y ocho baños en un terreno de más de 8 acres. La finca había sido construída para Laura Brevoort Sedgwick James, pero pasó a ser propiedad de Juan Trippe, fundador de Pan American World Airways.
El renombrado arquitecto Joseph Greenleaf Thorp fue el encargado de diseñar la mansión. Aún así, cuando Calvin Klein adiquirió la vivienda, contrató al arquitecto Thierry Despont para que le diera un nuevo estilo con una remodelación, llegando a aparecer en la revista Vogue Decoration en 1992.
Desde entonces, la mansión posee el aspecto que ostenta hasta hoy: una casa principal con cinco habitaciones y ocho baños, una piscina y un cobertizo para botes, ya que la vivienda ocupa un espacio de calle a calle. Cuando el matrimonio Klein se separó, Kelly siguió viviendo allí por un largo tiempo.