Bajar de peso es un proceso que requiere tiempo, dedicación y sobre todo voluntad. Según los expertos en nutrición, para lograr esta meta, debes intentar cambiar de vida, adquirir nuevos hábitos tanto en lo que la alimentación como en lo que al ejercicio se refiere. Esto es: no vale de nada seguir de pronto una dieta que vas a dejar de lado al cabo de unos pocos días.
Además, debes tener en claro que ninguna dieta es milagrosa, ya que lo único que van a hacer es que caigas en el tan temido "efecto rebote": primero un adelgazamiento muy rápido y luego un engorde aún peor.
Para bajar de peso necesitas caer en lo que se denomina un déficit calórico. Esto es, consumir más calorías de las que ingieres. En este sentido la reacción es fácil: moverte más y comer menos. Para conseguirlo es necesario optar por una alimentación sana y natural. Según uno de los nutricionistas más seguidos en redes sociales, el catalán Miquel Gironés, existen dos cosas que debes comer a diario para perder peso sin esfuerzo: tres piezas de fruta y un buen puñado de frutos secos (al natural, sin sal ni aditivos).
Comer fruta y avellanas o nueces ban a ayudarte a eliminar uno d ellos hábitos más peligrosos en cuanto a alimentación se refiere: picar entre comidas. Deja de lado ese café con pan que te tomas a media mañana y que te suma miles de calorías que no necesitas para vivir. De otro lado el segundo beneficio es que vas a empezar a cambiar tus postres renunciando a los que elabora (con más calorías de la cuenta) la industria alimentaria. Todo ello conllevará un pequeño cambio que hará que tu cuerpo note las consecuencias en muy poco tiempo.
Además, obtendrás otros beneficios, ya que la fruta tiene múltiples vitaminas que van a mejorar tu salud en general y no sólo tu peso. También tiene la capacidad de saciarte, lo que hace que tu cuerpo no necesite comer cada pocas horas para conseguir controlar tanto el hambre física como el emocional.