El plátano es una fruta noble que nos brindan beneficios para nuestra salud. Entre sus múltiples beneficios podemos encontrar el de prevenir el cáncer, regular los trastornos de ánimo, ser rico en antioxidantes, proteger al corazón, también posee un efecto antiinflamatorio, es una defensa natural contra las bacterias, y es uno de nuestros mayores aliados a la hora de adelgazar. Pero muchas veces terminamos descartando su cáscara porque pensamos que no posee ningún beneficio. Es por eso que en el siguiente artículo te diremos como aprovechar las hebras.
Estos filamentos blancos de los plátanos se asemejan a nuestros vasos sanguíneos y se los conoce como “paquetes de floema” y por más desagradables que sean para nosotros, el fruto tiene una vital función e importancia: son tejidos conductores que forman parte del sistema vascular de la planta, su función en específico es transportar agua, nutrientes y distintas moléculas que contribuyen al adecuado desarrollo de la planta.
También podemos decir que la cáscara del plátano mejora la digestión. Esto se debe a que posee mucha fibra, por lo que ayuda a mantener un óptimo funcionamiento del sistema digestivo. Para poder aprovechar la fibra debes escarbar con una cuchara el interior de la cáscara.
En cuanto a la belleza, la cáscara puede utilizarse como antiarrugas, ya que posee antioxidantes que ayudan a proteger la piel y a prevenir las arrugas. Se recomienda utilizar la cáscara de plátano, sobre todo, en la zona del contorno de ojos.
Es importante aclarar que este floema lleva a cabo el transporte masivo de agua y carbohidratos desde los sitios de síntesis; es decir, desde la parte fotosintética de la planta hacia los órganos vertedero o demanda, como las semillas o raíces. Comer estas hebras blancas del plátano no tiene ningún efecto perjudicial para el organismo, aunque al prescindir de su consumo sí que estás desperdiciando un par de nutrientes.