Andrea Legarreta, la famosa presentadora de televisión, tiene dos hijas producto del amor que consumó en matrimonio hace algunos años junto a Erik Rubín: Mía y Nina Rubín. Las adolescentes se perfilan como las nuevas promesas de la farándula mexicana gracias al talento que heredaron de sus padres en el ámbito musical y de la actuación.
Tanto Mía como Nina Rubín se destacan mediante sus propias facetas y de a poco han su nombre empezó a hacer eco en los principales portales de internet, programas de espectáculos y también en las redes sociales como Instagram donde tienen miles de seguidores. Siempre han estado vinculadas al medio porque Andrea Legarreta se destaca como actriz y presentadora desde hace más de 30 años.
Por su parte, Erik Rubín también les ha transmitido un legado producto de la gran carrera musical que ha realizado, luego de su paso por la reconocida banda Timbiriche. La pareja se encargó de que a sus hijas no les falte nada y además a diario pulen sus talentos. A sus 17 y 15 años, Mía y Nina, respectivamente, ya han trabajado en producciones del cine, televisión y teatro.
Las herederas tienen miles de seguidores en Instagram, donde presumen sus nuevos proyectos y sus innumerables viajes junto a sus padres. La familia de artistas se dedicó a vacacionar cada vez que pueden en distintos países, en el último tiempo estuvieron haciendo alarde de su buen gusto por la moda en Europa y Asia.
A sus 17 años, Mía se adentró en el mundo de la música y su talento es innegable. Cada vez que se presenta junto a su padre es ovacionada. La intérprete de “Me rehuso” y “Flecha” tiene más de 960 mil seguidores en su cuenta en Instagram y demuestra que es toda una celebridad ya que todas sus fotografías se vuelven virales a los pocos minutos.
Del otro lado, Nina, de 15 años, está empezando a abrirse camino en las telenovelas mexicanas y en el teatro. Ambas derrochan estilo y glamour mientras deleitan con sus lujosas vacaciones llenas de lindos paisajes. Uno de los últimos paseos de las hijas de Andrea Legarreta fue en París, Francia, donde derrocharon belleza con sus outfits parisinos.