Jake Lloyd es un actor que debutó a los 7 años en el cine con uno de los 'tanques' de Hollywood más taquilleros de la historia: 'Star Wars: Episodio I - La amenaza fantasma'. Su interpretación del niño Anakin Skywalker le generó un ascenso meteórico, pero al mismo tiempo, demasiadas presiones, acoso y estrés.
Sumado a esa situación, Jake Lloyd fue diagnosticado con esquizofrenia paranoide, su hermana murió y lo detuvo la policía cuando circulaba a 180 km/h con su auto. Así, una carrera que comenzó muy temprano y se consolidó desde el primer momento, quedó de lado ante la carga que significó.
Si bien Jake Lloyd participó de Madison, una película protagonizada por Jim Caviezel, decidió retirarse de la actuación porque las repercusiones negativas que se generaron con 'Star Wars: Episodio I - La amenaza fantasma' siguieron persiguiéndolo.
El joven ahora tiene 33 años y contó que sufrió bullying, que lo afectaron las críticas y el estrés de tener que dar sesenta entrevistas por día para la promoción de la película. “Toda mi vida escolar fue un infierno. Algunos niños fueron muy crueles conmigo. Fue una completa locura”, explicó Jake Lloyd en 2012 al sitio BlackBook.
En 2020, su familia publicó un comunicado en Geek News Now: “Jake Lloyd ha sido diagnosticado con esquizofrenia paranoide, pero desafortunadamente también tiene un padecimiento llamado anosognosia que provoca una falta de comprensión de su enfermedad. Se ha acercado más a su familia y todos estamos trabajando arduamente para ayudarlo con esto. Todavía es una persona amable y cariñosa”.