La bailarina, conductora de televisión y actriz, Sugey Ábrego tuvo que superar varios escollos para construir la carrera que tiene en la actualidad. Según comentó en las últimas horas, pensó en el suicidio porque un productor trató de sobrepasarse y debido a que su exmarido, Enrique Durán abusó física y emocionalmente de ella.
Desde la niñez Sugey Ábrego estudió baile en la Escuela Nacional de Danza con Elisa Carrillo Cabrera; luego, fue bailarina de Paulina Rubio, pero descubrió que lo que más le gustaba era la actuación y la conducción de televisión. “Era bailarina, tenía mis ingresos propios y de repente faltaba, por lo que yo le comentaba a Eugenio Cobo: -es que yo ya trabajo y todos los de mi salón vienen de juniors, vienen de casita, les pagan el departamento y todo”, aseguró en una entrevista hace unos días.
“Yo siempre fui muy decidida, imponía lo que quería, eso me permitió defender mi belleza porque reconocía lo que tenía”, añadió la actriz que se abrió paso sin la ayuda ni palanca de familiares. Hasta que un día se presentó a un casting en el que la pasó mal porque un productor de telenovelas -cuyo nombre no develó- le dio un beso y argumentó que lo hacía para ver la forma en que reaccionaba al personaje de villana. En ese momento, Sugey le dio una patada en los genitales, pero no lo denunció.
“No, claro que no lo denuncié. Para mí fue sorpresivo, fue un momento de duda, (te cuestionas) ¿yo lo propicié?”, expresó y agregó que no se lo contó a sus padres. A partir de ahí, aseguró que comenzó a seleccionar mejor sus castings y decidir en qué clase de artista quería convertirse, abandonó las pruebas de telenovelas y busco aparecer como conductora de televisión.
Tiempo después, en el programa de concursos “De poca”, Ábrego conoció a Enrique Duran, quien diseñaba motos. Tiempo después se casó, pero fue violentada por este hombre cuya violencia fue de menor a mayor. El divorcio llegó, pero para eso tuvo que pagar muchas deudas que Duran tenía a su nombre. La deuda fue tal que llegó a dejar la cuenta de Ábrego con 50 pesos, situación que la llevó a pensar en el suicidio.
“Mi dolor era tan grande que quería acabar con mi vida”, declaró por lo que tuvo que internarse en una clínica por un brote psicótico que experimentó antes de la pandemia. “Sólo recuerdo que estaba en la cornisa (del balcón de su departamento en el cuarto piso), y Juanita me agarró del suéter, en ese momento me senté, empecé a llorar y le pedí que llamara a mis papás porque necesitaba ayuda”, cerró Sugey Ábrego al hablar de su sufrimiento.