Helena Bonham Carter cumple 56 años este 26 de mayo. La conocida actriz de teatro y cine inglesa cuenta con muchos papeles destacados en su haber. Su rol más reciente como la princesa Margarita en la temporada 4 de The Crown definitivamente llamó la atención, consolidándola como uno de nuestros grandes talentos a tener en cuenta.
Como mujer de las artes, Helena también ha estado predominantemente interesada en hombres que comparten sus pasiones creativas, pero tuvo dos relaciones importantes con gigantes del ambiente cinematográfico, Kenneth Branagh y Tim Burton. “Ken y yo éramos muy diferentes de Tim y yo”, dijo una vez la actriz a The Guardian en 2020. “Sabes, Ken evitó dirigirme una vez que estuvimos juntos porque puede ser complicado y creo que no quería, de todos modos, eso es toda la sangre debajo del puente.”
Helena y Kenneth se conocieron inicialmente en 1988, según un artículo del L.A. Times, cuando coincidieron en un barco que flotaba por el Támesis. Recién en 1993, tuvieron su primer acercamiento cuandofue elegida para Frankenstein, que Kenneth dirigió y protagonizó. Pero fue en 1995, que Kenneth se separó de su entonces esposa, la actriz Emma Thompson, y posteriormente comenzó a salir con Helena. A pesar de ello, la pareja mantuvo su relación relativamente discreta y no confirmaron su relación hasta junio de 1997. “Por supuesto que estamos juntos y es muy agradable, gracias”, dijo Helena a los periodistas en ese momento.
Aunque su historia de amor fue muy buena, finalmente se separaron en 1999. "Estoy muy triste de confirmar que Kenneth Branagh y yo ya no estamos juntos", comunicó Helena. A pesar de que los dos tomaron caminos separados, aún se han mantenido amistosos a lo largo de los años. Unos años más tarde, en 2001, apareció la segunda relación importante de Bonham Carter, fue con el cineasta Tim Burton, mientras filmaba El planeta de los simios.
El particular director eligió a Helena para muchas de sus películas, incluidas Big Fish, Corpse Bride, Alice in Wonderland y Dark Shadows. La pareja en realidad nunca se casó y de su relación llegaron dos hijos, William Raymond, nacido en 2003, que lleva el nombre de sus dos padres, y una hija, Nell, en 2007. Además de su relación poco convencional, también optaron por no vivir exactamente juntos durante su relación, sino que optaron por casas contiguas en Belsize Park, Londres. Aunque la actriz británica usó la palabra "divorcio" al hablar del final de su relación, otros medios de comunicación han declarado que nunca se casaron oficialmente.