William Levy y Elizabeth Gutiérrez confirmaron su separación el pasado mes de febrero y nunca más se mostraron juntos públicamentes. Esta historia de amor después de los rumores de infidelidad que afectaron principalmente al actor cubano, quien alcanzó fama mundial con la telenovela colombiana “Café con aroma de mujer”, una de las más vistas en Netflix.
Levy y Gutiérrez tuvierion casi dos décadas de relación y dio como frutos sus dos hijos: Christopher Alexander y Kailey Alexandra. Se conocieron en 2002, en el reality de Telemundo “Protagonistas de telenovela” y luego empezaron un romance que terminó con la formación de una familia.
Desde la separación, ambos se mostraron muy reservados sobre el tema y evitaron hablar con los medios de comunicación. Los detalles acerca del final son desconocidos, mas sí se sabe que mantienen una buena relación de padres por el bien de sus hijos. Ahora, tras cuatro meses de separación, una serie de mensajes de ambos artistas llamaron la atención de todos.
Antes de viajar a España para concentrarse de lleno en su nuevo personaje de Alejandro Montecristo, William Levy pasó unas semanas en casa. En sus redes sociales, el protagonista de “Café con aroma de mujer” compartió varios mensajes de agradecimiento a sus fanáticos, mas otros dejan huellas de nostalgia y sentimentalismo.
William publicó un romántico video que habla sobre el amor, sobre la persona amada. Este posteo estuvo acompañado por una frase que denotaba tristeza y que alertó a sus seguidores. En líneas generales, el clip hacía alusión a las personas que piden perdón, que quieren estar contigo y que después de discutir se acercan porque no quieren estar peleados. “Esa gente es la que necesitas en tu vida”, es la frase final del video.
A esa reflexión, el ex de Gutiérrez escribió: “Si tienen esa persona, cuídenla, porque no se encuentra fácilmente”. Luego, citó una frase del actor Robin Williams que habla sobre la soledad incluso estando acompañado. “La peor cosa en esta vida es terminar con gente que te hace sentir solo”. Ambos posteos denotan reflexión, amor, desamor y tristeza.