Britney Spears lleva seis meses disfrutando de su libertad, y puede disfrutar una merecida nueva vida tras su victoria judicial en el caso de la revocación de la tutela legal que controlaba su carrera, finanzas y vida personal, gestionada por su padre, Jamie Spears. Una situación de extremo control por parte de su progenitor y su equipo, que la propia cantante definió como “esclavitud”.
Desde entonces, la cantante se ha dedicado a realizar y disfrutar de todas aquellas cosas que no pudo durante los más de 13 años que duró su tutela. Así, estrenaba el nuevo año comprometiéndose con su pareja desde hace cinco años, el actor Sam Asghari y, hace apenas unas semanas, anunciando que estaba embarazada del que será su tercer hijo.
Este fin de semana, la artista volvió con buenas noticias y compartió en sus redes una foto de la nueva incorporación a su familia: una gata marrón con manchas negras y ojos verdes llamada Wendy. Pero lo que en realidad más llamó la atención de sus seguidores fue la tela sobre la que se apoyaba la mascota. Así lo publicaba Britney: “¡Presentamos a Wendy! Es hora de MIAU chicos y chicas. ¡Y sí, este es el velo de mi vestido de novia!”.
Como Britney misma aclaró, se trataba del mismísimo velo de novia que usará en su matrimonio con su prometido. Un cúmulo de buenas noticias a la que se une otra, y es que la cantante y el actor ya han determinado cuándo contraerán matrimonio. Ahora bien, solo lo saben ellos dos y los pocos invitados que acudan al enlace.
Britney se casará próximamente con el padre del hijo que espera, Sam Asghari, de 40 años de edad, que es el cantante de la banda Stronger y entrenador personal. La pareja se comprometió en septiembre de 2021 luego de conocerse en 2016. Para la artista se trata de un verdadero triunfo en la vida tras la tutela que le impuso su padre durante 13 años, por la que no podía casarse ni tener hijos y ni siquiera disponer libremente de su fortuna.