Pasión de gavilanes volvió a conquistar a los seguidores de la famosa serie. Con el estreno de la segunda temporada, que llegó 15 años después que la primera, la vida de los Reyes Elizondo volvió a colarse en el centro de la escena. La serie logró reunir una vez más a sus antiguos protagonistas, pero en esta ocasión como padres de los nuevos “gavilanes”.
Mario Cimarro y Danna García atraparon una vez más con su romance a la audiencia. Sin embargo, mientras que a ella la hemos visto crecer en todos estos años, el actor se alejó bastante del mundo de las telenovelas luego de un conflicto con Telemundo. El cubano acusó a la cadena de llevar adelante una campaña de desprestigio en su contra y eso le valió el veto de varias producciones.
El galán de Pasión de gavilanes explicó hace un tiempo atrás que fue vetado luego de pedirles a las autoridades del canal que “le regresaran el dinero que le estaban robando a uno de mis compañeros. Es una práctica muy común que ellos hacen, cada vez que hacían una telenovela o algo así de a los compañeros más débiles del elenco les quitaban una parte de su sueldo y cuando yo me enteré de eso no lo podía creer”.
Luego las palabras de Mario Cimarro no le quedó otra que apechugarse hasta que el año pasado fue convocado nuevamente para darle vida a Juan Reyes. En todo este tiempo, el actor prácticamente no ha cambiado en sus rasgos físicos, aunque su vida sí ha sufrido varias transformaciones. Ya ha pasado dos veces por el altar y actualmente está comprometido.
La pandemia retrasó la propuesta de casamiento formal que le hizo a su novia, un modelo 21 años más joven que el actor de Pasión de Gavilanes. Se trata de Bronislava Gregušová quien fue finalista en el certamen de Miss Eslovaquia. Con ella está en pareja desde el 2020, año en que prácticamente se comprometieron.